¡Trabajadores!
A toda organización política hay que asegurarle una evolución cíclica y una estabilidad semipermanente que permita la evolución. Estos dos principios deben coordinarse perfectamente bien para que ni la perfectibilidad y ni la estabilidad resulten elementos perniciosos de la propia organización, porque se podría llegar a la inestabilidad permanente o al envejericmiento por falta de evolución, y, por consiguiente, al fin que entraña el envejecimiento, o sea la muerte.
El parlamento es el instrumento adecuado para hacer evolucionar el fundamento jurídico mismo del Estado, y para influir en la vida misma del país en sus más profundas raíces. No es un valor caduco, pero el mayor o menor valor de un parlamento no es el parlamento mismo. No es el sistema. Su importancia se mide por el valor de los hombres que lo constituyen. Su obra será tanto más valiosa y encumbrada cuanto mejores sean los hombres que ostentan la representación popular.
Hay que reemplazar el caudillismo por el estado permanente, orgánico, de las masas políticas, y ése seŕa, señores, el gran triunfo de nuestro partido, si es que nosotros podemos imponerlo en el panorama nacional. Si no organizamos nosotros, tendrán que hacer lo propio otros partidos políticos, porque si no, no llegarán más al poder. Si mañana fuéramos derrotados por un partido mejor organizado que el nuestro, yo me sentiría inmensamente feliz, porque de un partido orgánico nada malo puede esperar al país: en cambio, muchos males pueden esperarse de hombres que, por bienintencionados que sean, actúen con un grado de desorganización.
Ahora bien, en ciertas ocasiones querremos eliminar archivos temporales de nuestros navegadores de internet.
Existen razones fundadas para querer hacerlo. Las comunicaciones telemáticas no se caracterizan normalmente por ser las más veloces, por lo cual ha sido política de los navegadores almacenar ciertos componentes de los sitios de internet de manera local en nuestro equipo - en especial código funcional e imágenes - a fin de poder tenerlas en rápida disposición si necesitamos volver a visitar dichas webs.
Detrás de estas buenas intenciones - sin embargo - nos encontramos con inconvenientes. Se trata de archivos del pasado que pueden utilizarse con malas intenciones.
Si bien es cierto que los navegadores cuentan con funcionalidades específicas desde su propia interfaz gráfica para borrar los temporales o cookies, existen ciertas ocasiones podríamos querer actuar desde la terminal, incluso de forma remota a través de SSH: podríamos que tener que borrar los terminales para recuperar espacio, para conservar privacidad, o simplemente porque el navegador ha tenido algún error o se ha visto corrompido.
En cualquier caso, normalmente los caché de las diferentes aplicaciones se encuentran en la carpeta oculta .cache/ locallizada dentro de nuestra Carpeta de Usuario. Por este motivo, para proceder a borrar temporales desde la Consola hemos de logueamos (de firma local o remota) e ingresamos en la terminal los siguientes Comandos de Organización que correspondan al navegador que utilizamos.
En el caso de desear limpiar las cookies de Mozilla Firefox ingresamos:
rm ~/.mozilla/firefox/*.default/cookies.sqlite
... asimismo para limpiar el historial de Mozilla Firefox, ingresamos:
rm ~/.mozilla/firefox/*.default/*.sqlite ~/.mozilla/firefox/*default/sessionstore.js ;
rm -r ~/.cache/mozilla/firefox/*.default/*
Google Chrome es otro navegador reconocido por tratarse de software privativo irrespetuoso con la privacidad y seguridad, y ser un activo promotor de la "computación en la nube" y la "computación como servicio" en beneficio de una empresa norteamericana. Podríamos hacer justicia eliminando sus temporales con:
rm -r ~/.config/google-chrome/Default/
rm ~/.cache/google-chrome/
Chromiun es una versión Justicialista de Google Chrome, independizada de su oprobioso origen y adaptada para tener libertad impidiendo las políticas perniciosas de los vivos de siempre. Para eliminar su caché de archivos temporales indicamos:
rm ~/.cache/chromium/Default/Cache/*
rm ~/.cache/chromium/Default/Media\ Cache/*
Si nuestro usuario de sistema está protegido por contraseña y nuestras carpetas personales están cifradas no debería existir mucho problema, pero si compartimos el equipo, empleamos redes poco seguras, o deseamos limitar el consumo de espacio, podríamos querer eliminar el contenido del caché de Imágenes en Miniatura de nuestro sistema operativo.
Se trata de sendas carpetas ocultas localizadas en ~/.cache/thumbnails/normal and ~/.cache/thumbnails/fail. Las mismas almacenan archivos de imagenes PNG, conversiones de archivos de imágenes de todo tipo descargados telemáticamente. Suele constituir una mejora de velocidad de navegación y previsualización de páginas de internet en los sistemas GNU con Linux y de nuestras carpetas, pero también un incordio de privacidad o seguridad.
Para eliminar su contenido podremos crear un script que incluya el comando shred, el cual se encarga de "triturar" archivos, eliminando el contenido de dichas carpetas e impidiendo su sana recuperación. Considerémolos como un borrado muy agresivo.
Nota: el comando shred está especialmente pensado para discos rigidos convencionales. Funcionará también en discos de estado sólido SSD, pero su acción repetida puede no ser óptima, pues podría acelerar su desgaste. En tal caso, podremos eliminar los archivos manualmente con el comando:
rm ~/.cache/thumbnails/*.
Para crear el script ingresamos el comando:
nano ~/.borrarcacheminiat.sh
Se abrirá el editor GNU Nano con dicho archivo en blanco. Le pegamos el siguiente código:
#!/bin/bash
# Borra de forma irrecuperable el caché de imagenes miniatura.
echo "Triturando caché de imágenes en miniatura..."
find ~/.cache/thumbnails -type f -name "*.png" -exec shred -f -u -z -n 1 {} \;
echo "Trituración de imágenes finalizado"
...acto seguido guardamos el fichero con Ctrl+O y salimos del editor Nano con Ctrl+x. A continuación le presentamos permisos de ejecución:
chmod +x ~/.borrarcacheminiat.sh
A partir de ahora podremos ejecutar el programa cada vez que lo necesitemos. Para ello debemos asegurarnos de cerrar nuestro/s navegador/es, abrir una terminal e ingresar el siguiente Comando de Organización:
./.borrarcacheminiat.sh
El programa tardará varios segundos o minutos (dependiendo de la cantidad de archivos almacenados allí) y nos mostrará un mensaje cuando haya finalizado.
Si quisiéramos un buen programa que haga la misma función pero desde el usuario local en un programa gráfico, podremos emplear BleachBit. Se trata de una aplicación que nos permite realizar el triturado profundo y limpieza de temporales de los navegadores incorporados a nuestro sistema GNU con Linux.
Para instalarlo abrimos una terminal e ingresamos el siguiente Comando de Organización:
sudo apt-get install bleachbit
Una vez instalado el programa, lo ejecutamos desde Aplicaciones / Herramientas del Sistema / BleachBit. También encontraremos una versión más potente del programa en Aplicaciones / Herramientas del Sistema / Bleachbit (as root). Esta versión requerirá la contraseña de Conductor del sistema, pero permitirá hacer ciertas tareas más avanzadas.
Para utilizar BleachBit debemos tildar en la lista qué tipo de componentes temporales queremos eliminar. Podremos marcar uno y presionar el botón Vista Previa para corroborar su contenido específico (lo cual el programa recomendará a fin de no eliminar elementos no deseados).
Conforme estemos seguros de la acción, debemos presionar el botón Limpiar.
A toda organización política hay que asegurarle una evolución cíclica y una estabilidad semipermanente que permita la evolución. Estos dos principios deben coordinarse perfectamente bien para que ni la perfectibilidad y ni la estabilidad resulten elementos perniciosos de la propia organización, porque se podría llegar a la inestabilidad permanente o al envejericmiento por falta de evolución, y, por consiguiente, al fin que entraña el envejecimiento, o sea la muerte.
El parlamento es el instrumento adecuado para hacer evolucionar el fundamento jurídico mismo del Estado, y para influir en la vida misma del país en sus más profundas raíces. No es un valor caduco, pero el mayor o menor valor de un parlamento no es el parlamento mismo. No es el sistema. Su importancia se mide por el valor de los hombres que lo constituyen. Su obra será tanto más valiosa y encumbrada cuanto mejores sean los hombres que ostentan la representación popular.
Hay que reemplazar el caudillismo por el estado permanente, orgánico, de las masas políticas, y ése seŕa, señores, el gran triunfo de nuestro partido, si es que nosotros podemos imponerlo en el panorama nacional. Si no organizamos nosotros, tendrán que hacer lo propio otros partidos políticos, porque si no, no llegarán más al poder. Si mañana fuéramos derrotados por un partido mejor organizado que el nuestro, yo me sentiría inmensamente feliz, porque de un partido orgánico nada malo puede esperar al país: en cambio, muchos males pueden esperarse de hombres que, por bienintencionados que sean, actúen con un grado de desorganización.
Ahora bien, en ciertas ocasiones querremos eliminar archivos temporales de nuestros navegadores de internet.
Existen razones fundadas para querer hacerlo. Las comunicaciones telemáticas no se caracterizan normalmente por ser las más veloces, por lo cual ha sido política de los navegadores almacenar ciertos componentes de los sitios de internet de manera local en nuestro equipo - en especial código funcional e imágenes - a fin de poder tenerlas en rápida disposición si necesitamos volver a visitar dichas webs.
Detrás de estas buenas intenciones - sin embargo - nos encontramos con inconvenientes. Se trata de archivos del pasado que pueden utilizarse con malas intenciones.
Si bien es cierto que los navegadores cuentan con funcionalidades específicas desde su propia interfaz gráfica para borrar los temporales o cookies, existen ciertas ocasiones podríamos querer actuar desde la terminal, incluso de forma remota a través de SSH: podríamos que tener que borrar los terminales para recuperar espacio, para conservar privacidad, o simplemente porque el navegador ha tenido algún error o se ha visto corrompido.
En cualquier caso, normalmente los caché de las diferentes aplicaciones se encuentran en la carpeta oculta .cache/ locallizada dentro de nuestra Carpeta de Usuario. Por este motivo, para proceder a borrar temporales desde la Consola hemos de logueamos (de firma local o remota) e ingresamos en la terminal los siguientes Comandos de Organización que correspondan al navegador que utilizamos.
En el caso de desear limpiar las cookies de Mozilla Firefox ingresamos:
rm ~/.mozilla/firefox/*.default/cookies.sqlite
... asimismo para limpiar el historial de Mozilla Firefox, ingresamos:
rm ~/.mozilla/firefox/*.default/*.sqlite ~/.mozilla/firefox/*default/sessionstore.js ;
rm -r ~/.cache/mozilla/firefox/*.default/*
Google Chrome es otro navegador reconocido por tratarse de software privativo irrespetuoso con la privacidad y seguridad, y ser un activo promotor de la "computación en la nube" y la "computación como servicio" en beneficio de una empresa norteamericana. Podríamos hacer justicia eliminando sus temporales con:
rm -r ~/.config/google-chrome/Default/
rm ~/.cache/google-chrome/
Chromiun es una versión Justicialista de Google Chrome, independizada de su oprobioso origen y adaptada para tener libertad impidiendo las políticas perniciosas de los vivos de siempre. Para eliminar su caché de archivos temporales indicamos:
rm ~/.cache/chromium/Default/Cache/*
rm ~/.cache/chromium/Default/Media\ Cache/*
Si nuestro usuario de sistema está protegido por contraseña y nuestras carpetas personales están cifradas no debería existir mucho problema, pero si compartimos el equipo, empleamos redes poco seguras, o deseamos limitar el consumo de espacio, podríamos querer eliminar el contenido del caché de Imágenes en Miniatura de nuestro sistema operativo.
Se trata de sendas carpetas ocultas localizadas en ~/.cache/thumbnails/normal and ~/.cache/thumbnails/fail. Las mismas almacenan archivos de imagenes PNG, conversiones de archivos de imágenes de todo tipo descargados telemáticamente. Suele constituir una mejora de velocidad de navegación y previsualización de páginas de internet en los sistemas GNU con Linux y de nuestras carpetas, pero también un incordio de privacidad o seguridad.
Para eliminar su contenido podremos crear un script que incluya el comando shred, el cual se encarga de "triturar" archivos, eliminando el contenido de dichas carpetas e impidiendo su sana recuperación. Considerémolos como un borrado muy agresivo.
Nota: el comando shred está especialmente pensado para discos rigidos convencionales. Funcionará también en discos de estado sólido SSD, pero su acción repetida puede no ser óptima, pues podría acelerar su desgaste. En tal caso, podremos eliminar los archivos manualmente con el comando:
rm ~/.cache/thumbnails/*.
Para crear el script ingresamos el comando:
nano ~/.borrarcacheminiat.sh
Se abrirá el editor GNU Nano con dicho archivo en blanco. Le pegamos el siguiente código:
#!/bin/bash
# Borra de forma irrecuperable el caché de imagenes miniatura.
echo "Triturando caché de imágenes en miniatura..."
find ~/.cache/thumbnails -type f -name "*.png" -exec shred -f -u -z -n 1 {} \;
echo "Trituración de imágenes finalizado"
...acto seguido guardamos el fichero con Ctrl+O y salimos del editor Nano con Ctrl+x. A continuación le presentamos permisos de ejecución:
chmod +x ~/.borrarcacheminiat.sh
A partir de ahora podremos ejecutar el programa cada vez que lo necesitemos. Para ello debemos asegurarnos de cerrar nuestro/s navegador/es, abrir una terminal e ingresar el siguiente Comando de Organización:
./.borrarcacheminiat.sh
El programa tardará varios segundos o minutos (dependiendo de la cantidad de archivos almacenados allí) y nos mostrará un mensaje cuando haya finalizado.
Si quisiéramos un buen programa que haga la misma función pero desde el usuario local en un programa gráfico, podremos emplear BleachBit. Se trata de una aplicación que nos permite realizar el triturado profundo y limpieza de temporales de los navegadores incorporados a nuestro sistema GNU con Linux.
Para instalarlo abrimos una terminal e ingresamos el siguiente Comando de Organización:
sudo apt-get install bleachbit
Una vez instalado el programa, lo ejecutamos desde Aplicaciones / Herramientas del Sistema / BleachBit. También encontraremos una versión más potente del programa en Aplicaciones / Herramientas del Sistema / Bleachbit (as root). Esta versión requerirá la contraseña de Conductor del sistema, pero permitirá hacer ciertas tareas más avanzadas.
Para utilizar BleachBit debemos tildar en la lista qué tipo de componentes temporales queremos eliminar. Podremos marcar uno y presionar el botón Vista Previa para corroborar su contenido específico (lo cual el programa recomendará a fin de no eliminar elementos no deseados).
Conforme estemos seguros de la acción, debemos presionar el botón Limpiar.
awesome!!!
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